MADUREZ
Siento tu mano en mi hombro,
y todos los temores desaparecen por un instante.
Instante de cobijo, y tranquilidad que me gustaría alargar
deteniendo las manecillas del reloj,
que avisa con su insistente tictac,
cada milésima de segundo de nuestra vida.
Esos instantes que te hacen recordar, te hacen sentir,
te hacen revivir el amor de complicidad de muchas vivencias,
que por nada quisieses borrar,
Es importante seguir escribiendo capítulos
para que en apenas, otro instante, se vuelvan maravillosos recuerdos.
Día a día construimos sueños envueltos en ternura y sencillez,
construyendo un amor resistente a cualquier desasosiego
Deja tu mano sobre mi hombro
y nunca olvides que siempre ahuyentaré tus miedos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario